miércoles, 15 de junio de 2011

la delgada línea roja

dónde está el límite de lo que se puede hacer en democracia?? dónde la línea que separa mis derechos y los del que está enfrente?

¿resulta que un grupo personas "indignadas", o "perroflautas" o "rastas" o antisistema o antitodo, pueden quedar en la puerta de un parlamento e intentar linchar a unos políticos democráticamente elegidos...??
¿cómo pueden llamar corruptos y malhechores a concejales electos que no han estado nunca antes en política?

¿qué derecho tiene un grupo de gays o lesbianas, ("siempre en contra de los guetos" y quejándose de discriminación), a acorralar a un alcalde y su familia en la vía pública porque el ayutamiento ha prohibido el estruendo en las fiestas de un barrio que los primeros han tomado como propio?

a mi modo de ver todas estas personas, con su modo de actuar, están desligitimando por completo cualquiera de sus ideas o principios

y no se les puede parar porque han defendido, la menos al comienzo, unas ideas utópicas con las que cualquier ser humano comulga.., aunque han derivado no sé muy bien en qué.

pero en cambio, si tienes un aspecto digamos "normal", y no fumas porros, y no te manifiestas mediante caceroladas, o pitidos, o dando voces, tienes que respetar todas las normas, porque si no igual te multan o te detienen, o te sacan en la tele....

1 comentario:

  1. No debemos confundir un movimiento que surge desde la razón, con unos actos que no tienen nada que ver con el movimiento. Los indeseables estan a la que salta, para hacerse notar. leña al mono y caso a las reivindicaciones justas.

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