Yo tenía unos vecinos majos, (vaya, normales), una pareja joven que vivía en el mismo "descansillo", que, salvo porque ella a veces olvidaba las llaves y tenía que saltar desde mi casa al patio común para entrar a la suya por la ventana, no daban lo que se dice "
mayormente", problemas. Como es obvio, vivo en un primer piso.
Pues bien, un día venden su casa a otra familia: una viuda con sus dos hijos, varones y solteros...
Poco tiempo después llaman a mi puerta, abro y me encuentro a una "paisana" de cierta edad con una bata de flores, sin dientes (al menos visibles), unos pelos como escarpias... (cualquiera que haya visto a la actriz Kathy Bates en "Misery", se puede hacer una idea aproximada....), que me dice:
"
Señora, soy la nueva vecina, quiere que mi hijo le limpie la persiana del patio?" No, no, gracias de verdad, contesté.
"Que sí, que sí, que no le cuesta nada..."
Voy para la habitación y me encuentro a un tipo con tal pinta de loco que ya le habrían querido para protagonizar
"Psicosis"..., que me saluda desde el patio, escoba en mano, pronunciando sonidos guturales indescriptibles....
Después me enteré que era el retoño de más edad, oligofrénico, pero de apariencia digamos dócil o "manejable". El pequeño es esquizofrénico (y como un armario de cuatro puertas de grande). Pobres....
Poco despúés de ese primer encuentro, aquella buena señora que cuidaba de sus "
niños" (de 50 y 60 años aprox.) falleció inesperadamente...
Desde que falta mamá, los "
2 pequeños" se han descontrolado "bastante": han descuidado la medicación (el pequeño ha ingresado varias veces en Psiquiatría y un día tiró "algunos enseres" por la ventana a la calle), y probablemente la alimentación (el mismo ha adelgazado al menos 50 kg; parece ahora un muerto viviente), han recibido en casa a casi todas las putis (vienen a desayunar, pobrecitas mías) y yonkis de la ciudad (de hecho un día hubo una muerte por sobredosis, tal cual ...), y el mayor recoge todo lo que pilla en los contenedores (eso se llama s. Diógenes, creo.)...
En fin, mientras me concentro en combatir el mal olor que les acompaña (sé siempre si acaban de subir o están en ello por el rastro pestilente que dejan a su paso ...) y sobre todo, en evitar toparme con ellos...., sólo me inquieta de verdad una cosa:
Después de la muerte de mamá, no ví la esquela, y lo que es peor, no vi salir el coche fúnebre, ni el féretro, .........
Que cada uno piense lo que quiera......